(actualizado – julio 2020)
La extraescolar de fotografía es un proyecto de fotografía participativa para adolescentes desde 1 de ESO hasta 2 de bachillerato por ello la planteo como un espacio de “libre albedrío” y libre expresión en el cual nos relacionamos y nos conocemos a nosotros mismos a través de la fotografía.
Cada encuentro es un paréntesis en el día a día de un estudiante adolescente y aclaro este punto porque considero que este paréntesis de formalidades en su día a día es la clave para generar un espacio seguro en el que puedan sentirse libres de ser ellos mismos y compartir desde ahí lo que les interesa, o no, les preocupa o les motiva y eso lo llevamos a fotos.
Pero muchas veces estas preocupaciones o intereses se manifiestan a partir de las fotografías que hacen. Entonces a raíz de esas fotos se generan espacios de diálogos realmente interesantes y libres… y de ahí nacen proyectos de fotografía participativa.
Ejemplo de ello son estos proyectos que han realizado los adolescentes en diferentes cursos de la extraescolar:
CÁRCEL nació a raíz de una charla en la cual los adolescentes me comentaron sus puntos de vista sobre como percibían ellos el instituto al cual van. Qué les gustaría cambiar y por qué. Les propuse entonces que fotografiaran el instituto tal y como lo percibían y surgió un sentimiento común que dio nombre a este proyecto y fue CÁRCEL.
El siguiente proyecto de fotografía participativa y que se convirtió en expo fue YO SOY. Surgió en otra charla en la cual hablamos sobre la adolescencia, había varios que estaban a punto de acabar 4 de la ESO y tenían dudas sobre que bachillerato seguir. Les propuse entonces trabajar el quien soy para convertirlo en una declaración, YO SOY .
La fotografía tiene la capacidad de ofrecerle al adolescente la posibilidad de expresarse sin dar explicaciones ni justificaciones y que les facilita enormemente poder verse y ser visto, sobre todo en esta etapa tan compleja que es la adolescencia.
Entonces, ¿para qué sirve la extraescolar de Fotografía Vivencial? La fotografía les abre la posibilidad a los adolescentes de explorar sus estados emocionales y personales tan cambiantes y muchas veces fuera de su control de una manera creativa y libre.
A través de la fotografía los adolescentes interactúan porque otros se sienten identificados al ver sus fotos y a partir de ahí se pueden relacionar incluso sin mediar palabras, al menos al principio pero poco a poco las fotos facilitan expresar en palabras sentimientos y puntos de vistas.
Quizás por todo esto los adolescentes que vienen a la extraescolar no faltan, y año tras año repiten la experiencia, porque cada año no es diferente la extraescolar en sí, sino ellos.
La asiduad de la extraescolar es una vez cada 15 días y estamos una hora y media. Muchas veces incluso hay quien se queda algo más y charlamos un rato. También a lo largo del año se suelen hacer salidas fotográficas dependiendo el interés del grupo y las agendas.
Hasta aquí la experiencia de la fotografía con adolescentes. Si conoces o formas parte de un instituto o grupo de adolescentes interesados en recibir esta extraescolar no dudes en escribirme!
Hola! Agradecería información de esta actividad extraescolar (días, horarios, precios..).
Gracias
Gracias Ester por tu interés. Te envío un mail con la información.